Comienza el juicio, por favor tomen asiento.
Señor, se le acusa de atentar contra la vida de una población inocente, sin previo aviso y
con la clara intención de arrasar con todo a su paso, además de dejar millones de dólares
en daños y perjuicios hacia las propiedades y demás objetos de los ciudadanos
afectados, ¿Cómo se declara usted?
…
¿Se niega usted a responder mi pregunta? ¿Sabe acaso que consecuencias acarrea su
decisión de guardar silencio?, Veremos que sucede más adelante, pero le advierto que
su abogado tendrá que ofrecer grandes argumentos, de lo contrario será condenado a la
pena máxima que podemos infundirle en este tribunal.
Abogado por favor acérquese al estrado, presente su defensa.
Mi cliente, el cual representaré esta noche, estaba en todo su derecho de cometer tales
acciones, ya que ha sido presionado a esto por los mismos pobladores del lugar, como
un método de defensa para proteger su salud y bienestar. Además, por supuesto de ser
una respuesta a un ataque lento y doloroso que ha sufrido durante mucho tiempo sin
respuesta alguna de su parte; las negociaciones pacíficas no dieron resultados, así que
como último recurso se armó de valor y actuó contra sus opresores.
¿Cree usted válido afirmar que tal genocidio ha sido un método de defensa?
Lo creo y lo defiendo su señoría, tales actos no fueron más que un salvaje, despiadado y
fuerte aviso, solo aviso, de que algo más grande podría avecinarse si los pobladores no
concilian un acuerdo pacífico con mi cliente. Los pobladores no ceden señoría, están
convencidos de su papel de víctima; recae la responsabilidad en mi cliente sin conocer
los actos previos al ataque, las causas de la ira y el enfado que llevaron a tomar esta
desesperada salida.
El jurado tiene la última palabra, escuchemos que han acordado…
Se declara culpable al ambiente por intentar defenderse de los humanos, es inaceptable
tal conducta.
Y así, el ambiente de nuevo es el chico malo de la historia, los humanos matan lenta
pero eficazmente para eximirse de los juicios, mientras que un intento de defensa llama
la atención de tal manera que el ambiente no tiene más remedio que aparecer en los
encabezados de los periódicos y las noticias como un terrible asesino, destructor y
genocida. Mi visión, de la justicia en el mundo.
Autor:Santiago Salazar Gomez
Me sorprende cómo sin utilizar ningún signo del diálogos, ni guiones, se logre recerar esta historia. Yo m e imaginé el estrado judicial y todo lo demás, a pesar de que no se es preciso con el uso de la técnica. Yo creo que esto no cae dentro del género del cuento, pero parece un cuento!. Yo le habría suprimido el último parrafo, que pretende ser moralizador e intenta explicar un punto de vista. Eso definitivamente, saca este escrito de la categoría de cuento. Me gustó, pese a todo.
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