Cuenta la historia que un niño esperanzado por volver a ver a su padre, tenía
apenas 5 años, una edad fantástica en la que todavía los seres humanos creemos
en lo maravilloso, en cuentos de hadas.
Una noche, acostado en su cama, pudo observar un pequeño rastro de luz que
veía desde la ventana, pero aun el niño creyendo en la magia, siguió durmiendo
plácidamente; en el sueño, soñó con su padre, era una pequeña hada, que volaba
junto a él, lo sentía tan real, la brisa que rozaba sus mejillas, las hojas que tocaba
cada vez que volaba, todo era tan real, que el niño quiso quedarse en ese sueño
para siempre.
A la mañana siguiente, su madre fue a despertar al niño, pero este no reaccionaba
por nada del mundo, le dio un par de sacudones, hasta rendirse por completo,
impune ante la situación, no hizo más cosa que llorar en frente de la cama de su
hijo amado, en el sueño del niño, escuchaba un ruido algo melancólico,
desesperado el niño miro a su padre y le dijo: - Me tengo que ir, alguien al otro
lado me está esperando, pero en estos momentos de felicidad, siento algo que me
entristece, debo volver. Su padre al escuchar esas palabras le dijo: - Al fin pude
encontrarme nuevamente contigo, hijo mío, pero desafortunadamente hay alguien
que está esperándote del otro lado que te va a extrañar mucho más que yo, pero
recuerda este sueño, cada que puedas mirar la ventana, busca mi silueta y
apareceré en tus sueños.
El niño despertó y encontró a su madre llorando, y suavemente le dijo: - Mami, he
visto una tierra mágica, pero no hay nada más mágico que verte a ti todas las
mañanas.
Autor: Salomon Anaya Sampayo
Excelente cuento, del imaginario de la inocencia de la niñez.
ResponderEliminar"Cuenta la historia que un niño esperanzado por volver a ver a su padre, tenía
ResponderEliminarapenas 5 años, una edad fantástica en la que todavía los seres humanos creemos
en lo maravilloso, en cuentos de hadas" hay una idea inconclusa en ese párrafo. Si dices que "cuenta la historia que un niño esperanzado..." debería continuar con una acción por parte de ese niño no con una descripción de la situación. Si no quisieras plantear ninguna acción por parte del niño, deberías escribir: había un niño esperanzado por ver a su padre... Esa es una idea completa. Otra cosa, busca una palabra que encaje mejor que "impune", busca en la rae su significado y te darás cuenta que no aplica. Un último detalle, si dices que la mamá le dió un par de sacudones no puedes decir que hizo eso hasta rendirse por completo porque estás limitando el número de sacudones que la madre le dio a un número de dos. Espero hacerme entender. En cuanto a la idea general del cuento, muy tierna.
La frase con la que se abre el cuento no tiene sentido. Me adhiero al comentario de arriba: hay que darle sentido a las oraciones.Ten presente el uso de los puntos seguido y de las comas; hay frases en el cuento en las que era necesario poner un punto, en lugar de comas. Por ejemplo: "A la mañana siguiente, su madre fue a despertar al niño, pero este no reaccionaba por nada del mundo, le dio un par de sacudones, " Acá, después de "mundo", debe ir un punto y no una coma. Las frases se deben terminar cuando ya le hayas dado un sentido.
ResponderEliminarMaravilloso que mis alumnos tengan también ese lado humano y artístico. ¡Felicitaciones!
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